La educación tiene que ser creativa e innovadora?. Todos oímos este reclamo alguna vez, pero ¿cómo hacer? ¿De qué modo podemos acompañar las ganas de aprender de los chicos? En "Una que sepamos todos" la alegría es la clave para encender el entusiasmo por el aprendizaje y el juego, la gran puerta de entrada para conectar con el espíritu inquieto y curioso de los chicos. Con chispa de humorista, talento de escritor y mucha experiencia docente, Luis Pescetti arma una bolsa de juglar repleta de juegos musicales, de animación y de lectura en voz alta para llevar al aula, el campamento, el club y a todas partes.