Cuenta la leyenda que en una tribu de África, cuando una mujer se entera de que está esperando un hijo, corre a decírselo a las otras mujeres. Ellas creen que cada persona tiene una canción muy suya, la Canción de la Vida. Por eso, unos días más tarde, al amanecer, se adentran en la selva para descubrir, juntas, la canción de la nueva criatura.